Un dolor acompañado que atraviesa mi pecho, un dolor gemelo que genera que mi personalidad ambivalente se sienta como en casa, dos sensaciones que son como el día y la noche, como la luna y el sol que de día son enemigos para en la noche fundirse en un abrazo como los amantes en los parajes desolados al ritmo de dos canciones que suenan en mi cabeza de 2 autores: Corcobado y Calamaro, Calamaro y Corcobado, dos poetas para un sentimiento bipolar que carcome a este ídem ser... Una doble caricia mental que subsana un poco mi atemporal locura, en la que no sé si existo y juego a que pienso... Dos puntos de sutura en un corazón que sueña, vive, llora y por las noches suspira, dos puntos en común unidos en un espacio-tiempo, dos caminos que por azares del destino se interceptan y se dividen de nuevo para jamás sus trayectorias unir... 23/06/2007

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