Sé que estás ahí, sé que puedes escucharme, sé que me sientes aquí en lo profundo de tu corazón aún con vida. No, no soy tu conciencia, soy algo mucho más que eso, es más, tal vez tu conciencia ni siquiera sabe que existo, y es porque tú me ocultas casi de todos. Espera, ¿Por qué corres otra vez? ¿No te das cuenta que no puedes escapar? No, no soy una voz en tu cabeza, soy algo más profundo algo más intenso, ¿Es que aún no te das cuenta? Ya deja de correr, pareces una loca desesperada corriendo por todos lados agarrándote la cabeza. Mmmm ¿Qué haces? ¿Crees que escondiéndote en tu interior, en los recodos de luz podrás alejarte de mí? Jejeje, no será tan fácil, tú y yo estamos vinculados de una manera mucho más compleja de lo que admitimos. La luz no es infinita, si no, fíjate en el universo, la gran bóveda celeste, yo la llamaría la gran bóveda oscura, piensa en el infinito, la oscuridad se expande sobre las estrellas, ¿O qué opinas?. Vamos, las estrellas ni siquiera logran arañar la fría oscuridad, mucho más allá de los límites de tu imaginación, incluso de la mía. Pero estoy convencido de que esa negrura tan débil jamás podría destruir a tan magnifico ángel. Oh, creo que estás llorando. No, nunca te dejaré sola, ¿No lo entiendes verdad? Tú me diste la vida, tú me viste nacer, soy una parte de ti; es más, me atrevo a decir que tú eres yo, nada más que a veces te niegas a aceptarlo. Será mejor que te vayas acostumbrando a que somos la misma persona, porque tenemos toda una eternidad para compartir y no seria muy hermoso que en nuestra infinita vida te estés escondiendo de mi. ¿Qué? ¿Estacas en el corazón? jejeje, esas cosas no sirven mi amor; los demonios internos simplemente somos eternos... 10/02/2002
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