12 diciembre 2004

Día 18...

Un dolor me despertó a media noche, era mi corazón que estaba sufriendo recordándola. No podía entender porqué me obligaba a llorar, sin poder hacerlo. Y dejé que solito llorara. Pero sufría más y más, partía mi alma y aún así no permití que se desahogara. Quise tranquilizarlo recordando cosas bellas y que así riera conmigo, pero no lo logré. Su tristeza era igual, se tranquilizó cuando recordamos lo felices que éramos al lado de ella. Donde mi corazón formaba parte de ella y su alma formaba parte de mí. Fue así que comprendí su sufrimiento, calmándose así al llorar juntos... 17/02/2002

No hay comentarios.: